jueves, 24 de mayo de 2007

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Nuevo atropello a la prensa

Amenazan cronista de TiempoSur por fotografiar a un gendarme


Nuestro colega mientras retrataba a los gendarmes. Luego fue amenazado. (Foto de Jorge Riquelme).

Después del acto protocolar que tuvo lugar en casa de gobierno, un cronista de este medio fue víctima del atropello de inadaptados uniformados. Lo amenazaron y trataron de quitarle su cámara por retratar a un gendarme que 13 días atrás fue descubierto mientras se hacía pasar por un periodista, cuando en realidad efectuaba tareas de inteligencia en el marco de la asunción del nuevo primer mandatario, Daniel Peralta.
Ante esto se pidieron explicaciones comandante en Jefe de la Gendarmería. Por ello el cronista, pedirá hoy al Secretario de Derechos Humanos se resguarde la tarea de la prensa.

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Los anuncios del gobierno provincial efectuados en el día de ayer volvieron a tener un tinte de protesta y violencia, donde la paz social fue quebrada nuevamente.
Uno de los accesos a casa de Gobierno, precisamente la calle Piedra Buena que linda a la calle Roca, mostraba un escenario que desde hace más de de dos meses presenta nuestra ciudad: vallas que superan los dos metros y que contenían el ingreso de los más de 150 manifestantes que se presentaron para reclamar contra las autoridades que se hicieron presentes en “La Rosadita”.
La presencia de militantes del PJ en el acto, fue el condimento extra que enardeció a los trabajadores que esperaban su salida. Los pejotistas quedaron atrapados en el recinto gubernamental ya que el otro extremo (calle Alcorta) se emplaza la carpa por la dignidad. Esto resultó en la intervención de efectivos de gendarmería quienes debieron improvisar un cordón por la calle Roca sobre la vereda del colegio María Auxiliadora a fin de permitir el escape de los simpatizantes del ejecutivo.
En dicho momento un periodista de nuestro medio tomaba fotografías de la situación cuando observó a un gendarme que realizaba la misma acción y quien sorpresivamente resultó ser la misma persona que fuera “escrachada” por Tiempo Sur-aquel 11 de mayo luego de la asunción del actual gobernador Daniel Peralta- por tratar de hacerse pasar por periodista (estaba vestido de civil) cuando en realidad era se trataba de un agente que realizaba tareas de inteligencia y formaba parte del “dispositivo de seguridad”, según expresó en aquella oportunidad el “espía”. Al reconocer a esta persona, que ahora portaba la indumentaria reglamentaria, nuestro cronista intentó fotografiarlo mientras caminaba de espaldas hacia un grupo de gendarmes, que al vislumbrar este hecho cercaron al agente para evitar que retrate el rostro del mismo.
En este contexto, nuestro periodista pretende fotografiarlo nuevamente y el agente-que nuevamente fue puesto al descubierto-raudamente trató de quitarle la cámara a quien portaba la acreditación correspondiente a este medio.
Enseguida, los demás gendarmes utilizaron escudos para tapar el lente de la cámara del trabajador de prensa, instante en el que otro uniformado advirtió: “Saquenlo a este zurdito”.

Explicaciones

Ante esta falta de respeto al trabajo periodístico, nuestro colega se remitió al Comandante en Jefe, Roberto Oscar Caserotto para pedirle las explicaciones del caso. El responsable del accionar de la gendarmería le respondió que aguarden un momento de acuerdo al complejo escenario que se vivía pero le propuso en textuales palabras: “anda a hacer la denuncia”.

Amenaza

Posteriormente se dispone la salida del segundo grupo de gente de casa de gobierno por medio del cordón antes mencionado. Marco en el que se acerca un uniformado y que con tono amenazante le dijo al cronista: “Anda a hacer la denuncia que nosotros te vamos a hacer la contradenuncia y ya te vamos a agarrar”.

Disculpas

Horas después Caserotto, quién es el garante de la seguridad, mantuvo un encuentro con el periodista para solicitarle las disculpas del caso y aclarar la situación.

Reunión

Dada este panorama que se caracteriza por una ciudad militarizada y con un ámbito que no es el más loable para la labor de los medios, es que el colega de Tiempo Sur requerirá en el día de hoy, una audiencia con el titular de Derechos Humanos Alberto Marucco, para solicitarle existan garantías en la seguridad para todos los trabajadores de prensa.

Antecedentes

Luego de la asunción de Daniel Peralta a cargo de la gobernación, varios periodistas de diferentes medios que se encontraban situados afuera de la casa de gobierno esperando la salida de las autoridades, pudieron detectar a un individuo que vestido aparentemente de camarógrafo filmaba a los manifestantes y a quienes allí se encontraban.
Ante esta situación el fotógrafo del Diario Perfil, Juan Bolaños (quien fue agredido por gendarmes y policías afuera de la casa presidencial una semana tras) le preguntó quien era y cuál era su función en el lugar.
“Soy de dispositivo de seguridad, de Gendarmería”, detalló el efectivo que vestido de civil y con un gorro negro tomaba imágenes de un panorama en el que una hora atrás, se había efectuado una marcha congregada por la Mesa de Unidad Sindical, que reunió a más de 15 mil vecinos de nuestra ciudad.
-Somos todos de prensa, no sé si sabias que por ley está prohibido que estés trabajando con filmaciones y fotografías”, le recriminó Bolaños.
“No se si esta prohibido”, respondió el agente.
-Estas haciendo trabajo de inteligencia.
“Cumplo ordenes”, respondió el camarógrafo que no portaba ninguna identificación.
En ese contexto se presentó en el lugar el Sr Moyano, un gendarme con alto rango que al vislumbrar lo ocurrido salió en defensa del efectivo que era cuestionado por varios cronistas por su actitud.
“No se quién es, pero déjenmelo. No lo conozco”, suscribió Moyano, aunque recordemos que el “espía” ya se había identificado como miembro de la fuerzas.



Fuente: TiempoSur


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