martes, 15 de mayo de 2007

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Escrache a la Ministro

“OPERACIÓN ALICIA MARTIR”
Nadie tenía las cosas mas claras que ALICIA K cuando a mediodía del sábado 12 de mayo junto a sus dos hijas caminaba plácidamente por la calle Roca en pleno centro de la ciudad de Río Gallegos.

Fue sin dudas una maniobra premeditada minuciosamente en contra de las exhortaciones de todos los laderos del Frente para la Victoria y los jefes de las fuerzas de seguridad que le habían aconsejado largamente que desistiera de tales propósitos.

ALICIA no se jugaba, tampoco se arriesgaba, ni mucho menos –claro- cometía una imprudencia. ALICIA simplemente cumplía con un plan perfectamente hilvanado desde altas esferas del poder vinculadas a inteligencia en la que cabalmente sabían las derivaciones del hecho que la Senadora , Ministra y hermana presidencial se exhibiera públicamente en la convulsionada ciudad de Río Gallegos, sobre todo después de la asunción de un nuevo gobernador no electo ante la repulsión de una movilización histórica de mas 20.000 habitantes.

ALICIA supo siempre que iba a ser hostigada y agredida y ese era, precisamente, el objetivo esencial del plan. Es más aún: le llamó la atención que no lo hubieran hecho en la distendida caminata del mediodía en donde su cruzó con numerosos vecinos a mucho de los cuales saludara amablemente por la vereda soleada de la calle Roca. Frente a esta contrariedad redobló la apuesta y emprendió su marcha al restaurante “ROCO”.

Cabe destacar que “ROCO” no solamente es el restaurante más añejo de Río Gallegos (Ex Parrilla DIAZ) sino, además es el más céntrico, el más notorio y el más vidriado. Irrefutablemente: nadie que pretenda pasar desapercibido elegiría tal establecimiento para almorzar. ALICIA necesitaba que su presencia “se notara”, que no pasara desapercibida.

En efecto: cuando se propagó la noticia de su presencia en el Restaurante cientos de personas se hicieron presente en las inmediaciones para un clásico “escrache”, manifestación urbana consistente en el hostigamiento verbal hacia una persona pública determinada a la que se imputa un hecho lesivo al interés comunitario. Decenas de escraches se han formalizado en las últimas semanas en la provincia de Santa Cruz contra funcionarios de distinto pelaje.

ALICIA necesitaba mucho más que un escrache, necesitaba una agresión física, directa. La magnitud del “Operativo INMOLACIÓN” así lo exigía.

ZONA LIBERADA. Había que dejar a ALICIA totalmente sola y sin ningún tipo de resguardo, ni policial, ni de gendarmería, ni de militantes políticos fanáticos dispuestos a poner el cuerpo en defensa de cualquiera de los KIRCHNER. Eso explica porque a pesar del encierro de más de una hora de ALICIA en el restaurante no haya aparecido nadie para resguardarla. Fuentes confiables indican que desde afuera el mismo Carlos ZANINI se encargó de ello.

PRENSA NACIONAL. Había que dar tiempo a la presencia de los medios nacionales acreditados en la ciudad, cuestión que se consumara a escasos 15 minutos del sitio al restaurante.

CONTACTO DIRECTO. Había que lograr el contacto directo de la Ministro con la multitud de modo tal de tener asegurada una agresión directa. Es más aún, en medio del desconcierto, agentes infiltrados asegurarían la ofensiva directa a la humanidad de la Ministro. Eso explica las razones por las cuales ALICIA se negó a retirarse del restaurante por salidas seguras que les brindaron los propietarios del local como tampoco aceptó el cerco humano y el automóvil que los mismos dirigentes sindicales le ofrecieran para garantizar su seguridad física.

De esta manera ALICIA intencionadamente recorrió cerca de 300 metros rodeada de una multitud que la hostigaba buscando una agresión física que nunca pasaron de insultos de diversos calibre, un “tirón de pelo”, huevos y harina.

No era lo que ALICIA buscaba pero alcanzó y sobró para instalar en la prensa nacional la imagen de víctima con una eficacia que, al tiempo de contaminar el reclamo autóctono, cubría la extraviada teoría del atentado que KIRCHNER había intentado imponer sin éxito hace menos de 10 días. Alcanzaba para eso y para desplazar de la primera plana de los diarios del país las maniobras de corrupción que sofocan hoy a funcionarios del gobierno nacional y ponen en jaque al mismo Presidente de la Nación.

En fin: una simple y vulgar operación de prensa, como tantas otras, como la muerte de MARADONA, en la cotidiana lucha por los títulos de primera plana en un país convulsionado por un gobierno que se empecina en sostener su falsa imagen a como de lugar y a cualquier precio. Un gobierno que nunca aceptará que la hora de la declinación está golpeando a su puerta.

Por Miguel CHAZARRETA
Para OPI Santa Cruz
14 de Mayo de 2007

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