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¿De Vido para Octubre 07?
Pese a que resta conocer la opinión del presidente, de la boca del influyente ministro se escuchó esta mañana: "Quiero anunciarles que voy a ser el próximo candidato a gobernador de Santa Cruz".
De Vido recibió hoy a un intendente de Santa Cruz que vino a Buenos Aires a parlamentar con el ministro en representación de 10 jefes comunales, sobre un total de 14 que maneja el kirchnerismo santacruceño.
Precisamente, allí se habló del inconveniente que genera el método de conducción hiper centralizado de Néstor Kirchner, que maneja personalmente la política y la gestión de su provincia. Como la mayoría de los referentes tienen llegada a él, tienen que esperar al fin de semana para hablarle -más aún cuando viajaba habitualmente- y esto genera demoras y contra ordenes.
Kirchner cuando algún importante dirigente le cuestionó una vez la capacidad de Daniel Scioli de conducir un distrito complicadísimo como la provincia de Buenos Aires, contestó: "Yo para gobernar Buenos Aires sólo necesito un teléfono". Es sencillo imaginar en que lugar deja esa forma de ver la política, al gobernador que eventualmente ocupe el cargo en Santa Cruz. Algo de este manejo también impactó en la salida del más independiente Sergio Acevedo.
Lo cierto es que para destacados pingüinos como Rudy Ulloa Igor, con Julio de Vido en la gobernación, por tratarse de uno de los pocos hombres que le discute a Kirchner, estaría garantizada cierta gobernabilidad. No así con Alicia Kirchner.
La noticia se produce en un marco de máxima convulsión en la provincia del presidente. Pese a que De Vido había sonado un año atrás como posible candidato, todos daban por descontado hasta los incidentes de esta semana que sería Alicia Kirchner la postulante, posibilidad que sigue vigente ya que Kirchner aún no dijo la última palabra.
Pero es necesario reconocer que ante la escalada del conflicto que incluyó represión y heridos, la ministra de Desarrollo Social se mantuvo ajena y lejos de su provincia. El propio Kirchner ya habría analizado con su hermana bajar su candidatura, ya que ella no estaría dispuesta a asumir el poder con una situación social tan inestable.
El ministro de Planificación se garantizaría además con su postulación cierta protección o al menos cierta distancia, cuando algunas causas como Skanska lo acechan.
Además, sería una salida de lujo del gobierno nacional -si gana las elecciones-, dado que su relación con Cristina Kirchner no sería la ideal, y la primera dama en su supuesta intención de conformar un gobierno más "institucional" de aspecto socialdemócrata, alineado con los demócratas de Estados Unidos y alejado del "populismo" de su marido y del venezolano Hugo Chávez, no se sentiría del todo cómdoda con el ministro en un eventual gobierno suyo.
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