sábado, 26 de mayo de 2007

507

Si los Tiburones fueran Personas


LA CUERDA CORTADA
(Bertolt Brecht)


La cuerda cortada puede volver a anudarse,
vuelve a aguantar,
pero está cortada.

Quizá volvamos a tropezar, pero allí
donde me abandonaste no,
no volverás a encontrarme.


"Si un Traidor puede más que unos cuántos
Que esos cuántos no lo olviden fácilmente
"

«Si los tiburones fueran personas», preguntó al señor K. la hijita de su arrendadora, «¿se portarían mejor con los pececillos?» «Por supuesto», dijo él.
«Si los tiburones fueran personas harían construir en el mar unas cajas enormes para los pececillos, con toda clase de alimentos en su interior, tanto vegetales como animales. Se encargarían de que las cajas tuvieran siempre agua fresca y adoptarían toda clase de medidas sanitarias. SÍ por ejemplo un pececillo se lastimara su aleta, le pondrían inmediatamente un vendaje de modo que el pececillo no se les muriera a los tiburones antes de tiempo. Para que los pececillos no se entristecieran, se celebrarían algunas veces grandes fiestas acuáticas, pues los peces alegres son mucho más sabrosos que los tristes.
Por supuesto, en las grandes cajas habría también escuelas. Por ellas los pececillos aprenderían a nadar hacia las fauces de los tiburones. Necesitarían, por ejemplo, aprender geografía, de modo que pudiesen encontrar a los grandes tiburones que andan perezosamente tumbados en alguna parte. La asignatura principal sería, naturalmente, la educación moral del pececillo. Se les enseñaría que para un pececillo lo más grande y lo más bello es entregarse con alegría, y que todos deberían creer en los tiburones, sobre todo cuando éstos les dijeran que iban a proveer un bello futuro. A los pececillos se les haría creer que este futuro sólo estaría garantizado cuando aprendiesen a ser obedientes. Los pececillos deberían guardarse muy bien de toda inclinación vil, materialista, egoísta y marxista; y cuando alguno de ellos manifestase tales desviaciones, los otros deberían inmediatamente denunciar el hecho a los tiburones.
»...Si los tiburones fueran personas, también habría entre ellos un arte, claro está. Habría hermosos cuadros a todo color de las dentaduras del tiburón, y sus fauces serían representadas como lugares de recreo donde se podría jugar y dar volteretas. Los teatros del fondo del mar llevarían a escena obras que mostraran a heroicos pececillos nadando entusiásticamente en las fauces de los tiburones, y la música sería tan bella que a su son los pececillos se precipitarían fauces adentro, con la banda de música delante, llenos de ensueños y arrullados por los pensamientos más agradables.
Tampoco faltaría religión. Ella enseñaría que la verdadera vida del pececillo comienza verdaderamente en el vientre de los tiburones. Y si los tiburones fueran personas, los pececillos dejarían de ser, como hasta ahora, iguales. Algunos obtendrían cargos y serían colocados encima de los otros. Se permitiría incluso que los mayores se comieran a los más pequeños. Eso sería delicioso para los tiburones, puesto que entonces tendrían más a menudo bocados más grandes y apetitosos que engullir. Y los pececillos más importantes, los que tuvieran cargos, se cuidarían de ordenar a los demás. Y así habría maestros, oficiales, ingenieros de construcción de cajas, etc. En pocas palabras, si los tiburones fueran personas, en el mar no habría más que cultura.»


BERTOLD BRECHT
(fragmento de "Historias del señor Keutner")


Fuente: "Malditos corruptos"

1 comentario:

Anónimo dijo...

AMIGO, acá pasando por tu espacio, que es como ir de visita a Turbio... qué loco que nunca pasé por tu ciudad adoptiva.
-6º me dice el Firefox, a las 4 de la mañana. Pero más frío habrá en la conciencia de muchos, ¿no?

Te cuento, a vos, y a esa mujeraza que está al lado tuyo, que hoy estuvimos organizándonos en la calle de la Dignidad, por el tema de mantener sí o sí las Carpas. Es cuestión de organizarse mejor. También se hizo un padrón de compañeros disponibles par nuevos turnos. Obvio que estaré también, a contraturno con mi flaca coraje.

A ver, qué más decirte, entre las mil cosas que quedaron... Ah, sí, quiero que escribas. Sí, vos y tu compañera. ¡Dejen de copypastear, jajaja! No, en serio, sabemos que tienen mucho que decir, y encima muy bueno. Y ni hablar que como catarsis, se van a ahorrar mucha plata de sicólogos !!!

Chicos, nuestro abrazo infinito.

Nenina y Toni.


http://malditoscorruptos.blogspot.com