viernes, 11 de mayo de 2007

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La caída de otro mandatario en la provincia kirchnerista

Asume Daniel Peralta la gobernación de Santa Cruz y se espera un nuevo canal de diálogo con docentes

El hasta ahora diputado provincial e interventor de Yacimientos Carboníferos Fiscales de Río Turbio reemplazará hoy a Carlos Sancho. Conciliador dijo que “Santa Cruz necesita pacificarse”.

El hasta ayer diputado provincial, Daniel Peralta, asume hoy al frente de la gobernación de Santa Cruz tras la renuncia de Carlos Sancho, en medio de un conflicto con los docentes y luego de una brutal represión durante una manifestación de trabajadores municipales.

En tono conciliador, el futuro gobernador dijo ayer que “Santa Cruz necesita pacificarse” lo que despertó las esperanzas hacia la apertura de un nuevo canal de diálogo con los docentes en conflicto.

“Tenemos que abrir el diálogo con todos los sectores”,
prosiguió el hasta entonces interventor de Yacimientos Carboníferos Fiscales de Río Turbio, quien de entra dejó en claro a quien responde al afirmar que con el "modelo" del presidente de la Nación, Néstor Kirchner se “levantó” Santa Cruz.


Después de que se votara su asunción como vicepresidente primero de la Legislatura provincial –paso formal necesario para ser nombrado gobernador-, Peralta dijo que mantuvo reuniones desde la mañana con los actores sociales involucrados, mientras que anticipó que van a armar paritarias para resolver los distintos reclamos salariales.

Ayer, acorralado por una la creciente tensión en la provincia y tras la represión policial del miércoles que dejó varios heridos, Carlos Sancho, renunció a su cargo al frente de la Gobernación y rapidamente el ministro del Interior, Aníbal Fernández, anunció que sería reemplazado por Peralta.

Desde el Gobierno, se lanzaron duras acusaciones al gobernador saliente, por la represión policial, que dejó 18 heridos. El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, responsabilizó a Sancho. " Ha sido un enorme promotor de todo el desorden que se vivió ayer en Santa Cruz". No obstante, señaló: "Carlos Sancho, con mucha dignidad, dio un paso al costado".

En tanto el ministro del Interior, Aníbal Fernández, señaló que el presidente Néstor Kirchner sugirió el alejamiento de Sancho luego de que "se comprobara que fue herido en un pie un trabajador". Al enterarse del trabajador herido, la posición del Presidente fue " muy dura, de mucha bronca", dijo Fernández, "por su historia de respeto a los derechos humanos".

"El gobernador a cargo de la provincia (Carlos Sancho) presentó su renuncia, por el malestar del Presidente", dijo Fernández.

Por otra parte, el ministro del Interior reclamó ayer la renuncia del intendente de Río Gallegos, el radical Héctor Roquel, y lo acusó de ser el responsable de que se desencadenara la represión en la protesta de trabajadores municipales. "Es responsable de haber querido entrar con las máquinas, donde hubiera hecho un desastre", dijo el ministro.

" Aspiro que el intendente tenga la misma estatura moral y política que tuvo Sancho al renunciar. El fue el gestor de la situación de Santa Cruz cuando respondía a los generales de la dictadura", aseveró Aníbal Fernández, en declaraciones a Crónica TV.

Por su parte, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, también reclamó la renuncia de Roquel, aunque admitió lo "desmedido" del accionar policial del miércoles.

"Aún admitiendo lo desmedido de la reacción policial, nadie puede dejar de analizar lo tremendo, lo irracional de la actitud de Roquel, un intendente al que le piden un aumento de sueldos y va con máquinas y topadoras, tratando de llevarse por delante la casa de gobierno provincial", dijo Fernández en diálogo con Radio Del Plata.

"Si Roquel tiene un poco de dignidad, debería seguir los pasos de (Carlos) Sancho", dijo el jefe de Gabinete.

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